Cuando un usuario llega a tu página web o tienda online, debes dejarle claro qué puede hacer en ella. Tienes que ofrecerle mensajes concretos y directos que le hagan tomar la decisión que buscas, sin que lleguen a abandonar la página al cabo de unos segundos. ¿A qué me refiero? A la llamada a la acción (Call to action – CTA). La llamada a la acción es el botón de la conversión, el clic imprescindible que deben hacer los usuarios de una web, el paso definitivo que ellos darán y con el que tú lograrás el objetivo marcado. Pero, ¿cómo conseguir ese clic final?
Al crear una página web, una landing page o una ficha de producto en cualquier tienda online, lo primero que debes tener claro es qué objetivo quieres conseguir, porque así definirás claramente cómo será esa llamada a la acción. Ya sea una suscripción a un boletín, que dejen un correo electrónico, que realicen la descarga de algún contenido, que dejen un teléfono o compren un producto. Da igual, sea cual sea el objetivo, el call to action ha de ser claro y visible.
Factores para realizar una llamada a la acción
Los principales factores que debes tener en cuenta a la hora de introducir esa llamada a la acción son los siguientes: contenido, ubicación y formato.
Contenido
Si tienes definido qué objetivo quieres lograr, debes realizar una llamada a la acción clara, concisa, directa. Es decir, si quieres que el usuario compre tu producto, en el CTA debes indicar ‘Comprar’ o ‘Añadir al Carrito’. Sin ambages. Tienes un objetivo y el call to action es la forma de conseguirlo, así que hay que dejarlo claro. Si pones una palabra que no se corresponda con la acción corres el riesgo de que el usuario se eche atrás y abandone la conversión. Lógicamente el CTA irá acompañado de algún texto breve y de alguna imagen que invite al usuario a realizar la acción, aunque en este artículo solamente me estoy centrando en cómo ha de ser el botón.
Ubicación
¿Dónde situar el CTA? La ubicación varía según el diseño de la página en cuestión, pero una cosa sí tiene que quedar clara: debe verse a golpe de vista, es decir, tiene que estar en una zona en la que el usuario pueda verlo nada más entrar a la página, sin la necesidad de hacer scroll. No obstante, a la hora de ubicarlo hay que tener en cuenta el diseño de tu página, colocándolo donde mejor convenga, pero sin romper la estructura.
Si el texto de la web, de la landing page o de la ficha de producto es largo, tienes la posibilidad de introducir una segunda llamada a la acción en la parte inferior, lo que aumentará la posibilidad de conversión. Lo que nunca debes hacer es meter una segunda llamada a la acción distinta a la anterior, ya que si haces esto lo único que provocarás es desviar la atención de tu objetivo principal, perdiendo así conversiones.
Formato
La forma de presentar el CTA también es importante. Es el botón en el que pretendes que tus usuarios pinchen, por lo tanto debe prevalecer a simple vista. El tamaño importa si hablamos de la llamada a la acción. Por ello, tienes que poner un botón grande, a ser posible de un color llamativo, que sea lo primero que resalte en la página, obligando al usuario a centrar su atención sobre él, que le invite a realizar ese clic que buscas. También puedes hacerlo interactivo, es decir, que cambie de color cuando el ratón pase por encima, ya que este hecho centrará la atención del usuario y, nuevamente, estarás cerca de lograr el clic de la conversión.
Conclusión
Con estos factores, el CTA resaltará sobre el resto del contenido de la página. Pero no hay que quedarse aquí, sino que posteriormente hay que ir midiendo los resultados, comprobando si la llamada a la acción es efectiva o si, por el contrario, no estás logrando nada. En este último caso te tocará modificarlo, corregir los errores y buscar nuevamente la fórmula que te ayude a lograr el objetivo.
Si necesitas ayuda para crear tu página web con una call to action efectiva, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Por último, recuerda que si este artículo te ha resultado interesante, puedes contribuir al conocimiento compartiéndolo en las redes sociales o dejándonos algún comentario.
*Artículo actualizado.